¿Te sientes apática y aletargada? Quizás es el momento de introducir el sabor picante en tu dieta.
Este sabor, cuando lo elegimos de fuentes de calidad, beneficia a personas sedentarias, con señales de frío y con tendencia a condiciones de humedad anormal y mucosidad.
Tomado moderadamente calienta el cuerpo, estimula el movimiento y la salida de fluidos, como saliva, moco, sudor, y jugos gástricos, por lo que también resulta interesante para potenciar la digestión.
El sabor picante, está asociado al otoño y aporta una energía que ayuda a tonificar pulmón e intestino grueso, los órganos asociados a esta estación.
Existen alimentos picantes con efectos diferentes según sean picantes caloríficos, enfriadores o neutros, cada uno de ellos con efectos ligeramente diferentes para tu organismo.
¿Quieres conocer lo que este sabor puede hacer por tu estado de ánimo y tu salud?
Echa un vistazo a mi último artículo para La finestra sul cielo, aquí.
