El buen tiempo nos lo pone fácil para comer bien.
Comenzar o acompañar tus platos con una buena ensalada de hojas verdes, es una de las mejores ideas para refrescar, saciar y tonificar los órganos relacionados con el verano: corazón e intestino delgado.
El sabor relacionado al elemento fuego que nutre estos órganos es el amargo y afortunadamente casi todas las hojas verdes de estación tienen, además de otros, ese sabor.
Preparar una buena ensalada es rápido y delicioso. Intenta ir variando de ingredientes, asegurando que incluyes en ella diferentes texturas y toques crujientes (cacahuetes en este caso), así cómo algún alimento fermentado de calidad (esta vez han sido las aceitunas).
Para el aliño, la ensalada de hoy lleva lo clásico, vinagre y aceite, dando preferencia al vinagre de manzana, con un interesante valor a nivel enzimático y al aceite de oliva ecológico.
En lugar de sal, cuando no combino los ingredientes del aliño de antemano para que la sal pueda diluirse, prefiero utilizar levadura nutricional. Por un lado aporta un sabor salado delicioso, y además es fuente de vitaminas del grupo B, tan importantes para nuestra salud de nuestro sistema nervioso
¡Deseo que te guste!
Ingredientes:
Rúcula
Aguacate
Aceitunas
Un puñado de cacahuetes u otro fruto seco
Un puñado de pasas
2 c.s. de levadura nutricional
2 c.s. de vinagre de manzana
3 c.s. de aceite de oliva virgen extra
Elaboración:
Lava, seca y coloca la rúcula en un plato o ensaladera.
Añade el aguacate cortado a trozos.
Las aceitunas, pasas y cacahuetes.
Espolvorea con levadura nutricional y añade los líquidos para el aliño.
¡La tienes!
Prepárala con amor… y ¡Qué la disfrutes!
