Aunque tarde, las habas han comenzado a dar fruto hace unas semanas y las estoy introduciendo en casi todos mis platos.
También los tirabeques están ofreciendo sus vainas planas y crujientes.
Hace unos días improvisé una menestra rápida a la que me apetecía añadir algo dulce y opté por el boniato.
¡Quedó deliciosa! con ese dulzor que relaja y te deja tan a gustito 😉
Para darle el toque crujiente, recogí algunas hojas de llantén y las preparé en tempura. Ummmm se mantienen crujientes por mucho tiempo, ¡un lujazo!
Merece la pena probarla, ¡Yo ya la he repetido varias veces!
Deseo que te guste…
Ingredientes para 2 personas:
1 cebolla grande
1 boniato grande
1 cuenco grande de habas (ya peladas)
1 cuenco mediano de tirabeques
Hojas de llantén
Harina de garbanzos
Elaboración:
Pica la cebolla en daditos finos y comienza a sofreír en una sartén con una pizca de sal y aceite de oliva. Yo he utilizado una plana de acero inoxidable que tiene tapa, pues luego es interesante dejarlo todo unos minutos tapado.
Pela y corta el boniato de daditos. Cuando veas que la cebolla comienza a estar doradita, incorpora el boniato y las habas, añade otra pizca de sal, mezcla bien y coloca la tapa.
Lava los tirabeques y quítales el extremo por el que estaban unidos a la mata.
Remueve las verduras de la sartén de vez en cuando para que no se peguen. Si lo vieras necesario puedes añadir un poquito de agua. Yo no utilicé nada, pero me aseguraba de que la tapa estuviera bien puesta para que se generara vapor dentro y removía rápidamente de vez en cuando.
Cuando el boniato y las habas estén tiernas, incorpora los tirabeques encima, otra pizca de sal y tapa. Los tirabeques recién lavados aportarán el toque de agua que necesitamos para que se cocinen.
Deja a fuego bajo 5 minutos más y apaga.
Prepara mientras la tempura. Mezcla en un bol ancho un poco de harina de garbanzo, 1/2 taza aproximadamente, con un poco de agua. Ve añadiendo el agua poco a poco hasta formar una masa ligera pero no excesivamente acuosa. Puedes hacer esta preparación al comienzo de todo, pues la harina de garbanzo suele engordar, y así podrás ver si necesitas ajustar algo de agua justo antes de utilizarla.
La proporción de agua suele ser igual a la de harina, pero realmente es cuestión de ir ajustando a tu gusto. A mi me gusta que sean ligeras para no tomar tanta harina.
Calienta aceite en una sartén y ve untando una a una las hojas en la tempura y friendo de poco a poco, para que no se toquen en la sartén y no baje la temperatura del aceite. Cuando veas que están hechas por un lado, da la vuelta y deja unos segundos más. Saca sobre papel absorbente.
Cuando tengas la tempura lista. Emplata la menestra, sirviendo las verduritas de la sartén con unas hojas de tempura de llantén. Te va a encantar…
Cocínala con amor… y ¡qué la disfrutes!