Cuanto más observo los platos que preparo, más me doy cuenta de las maravillas que ciertos ingredientes tienen y las cuales muchas veces pasan por alto por ser alimentos que utilizo a diario.
Hace unos días me preparé este delicioso plato de arroz con las verduritas que encontré en el frigorífico.
Ya he hablado en recientes posts de las ventajas de tener arroz cocinado en la nevera para posteriores usos. Hoy, a los efectos prebióticos de este humilde grano, le sumamos las propiedades anticancerígenas del brócoli.
¿Y qué hace que el brócoli tenga esas propiedades? Entre otras cosas que activa las defensas gracias a los glucosinolatos que contiene y que actúan estimulando el sistema inmunitario para que elimine las células tumorales.
Esta verdura es además especialmente interesante para reducir la Helicobacter pylori, actuando como un antibiótico. En este caso se recomienda su consumo crudo o casi crudo, en batidos o ensaladas.
El brócoli ayuda a depurar el organismo, estimulando el funcionamiento del hígado.
Es además, una fuente excelente de hierro, además de calcio y magnesio, resultando muy beneficioso para la mujer, ayudando a prevenir anemias y osteoporosis, así cómo el cáncer de mama.
Os dejo con la receta…
Ingredientes:
Arroz integral cocido para 4 personas
4 zanahorias picaditas
2 dientes de ajo picaditos
Maíz cocido
Flores de brócoli
Aceite
Sal
Elaboración:
Comienza salteando las zanahorias en un wok con un poco de aceite y una pizca de sal. Saltea 3 a 4 minutos sin dejar de remover.
Añade el ajo y saltea un par de minutos. Incorpora las florecitas de brócoli, otra pizca de sal y saltea otro par de minutos más o un poquito más de tiempo en función del tamaño en que hayas cortado las flores. Yo las salteé 2 o 3 minutitos.
Añade el maíz, remueve bien y finalmente incorpora el arroz y mezcla bien todos los ingredientes.
Deja un par de minutos para que se temple el arroz y disfruta de un plato rápido, delicioso y nutritivo.
Cocínalo con amor… y ¡qué lo disfrutes!
